Pierna de cordero al horno en cocina solar

Pata de choto solar con patatas y cebolla. 

Hoy en pleno mes de julio las altas brumas de verano han velado el sol lo justo (un 20%) para poder hacer una carne como el cordero a fuego lento.  Fijaros por tanto en la jugada:  si el cielo hubiera estado limpio y azul, con el chorro de fotones que cae en estas latitudes, la carne se habría hecho en 1 hora, pero me habría exigido estar dando la vuelta a la pierna cada 5 minutos, como si de una barbacoa giratoria se tratase, debido a que en el centro del asador encima de mi alsol 1.4 las temperaturas se elevan a más de 300 grados.  

Pero hoy el cielo ha puesto el velo cual filtro de fotografía, de esos que se llaman flood y así  durante tres horas he dejado la pierna de cordero churruscarse sin peligro de quemaduras, dando la vuelta a la pata cada 30 minutos, algo muy cómodo. He podido incluso irme a la calle dos veces a hacer unos recados, sabiendo que no se me iba a quemar.   Bueno, y aquí va la receta, sencilla y sabrosa:

INGREDIENTES

Para 4 - 6 personas

1 Pierna de Cordero de 2 - 2,5 kg.

6-8 patatas medianas rojas sin pelar, bien lavadas.

3 Cebollas rojas pequeñas, enteras, peladas.

2  Zanahorias cortadas.

3-4 dientes de ajo.

Medio vaso de aceite de oliva.

Puñadito de sal. 

Tomillo y orégano. 

Recipiente: Asador de chapa fuerte esmaltada con tapa. Ver entrada de herramientas del chef solar. 

Preparación:

Lavamos un poco la carne y la secamos, le clavamos un cuchillo con punta en tres o cuatro sitios para poder introducir medios dientes de ajo. Dejamos un par de dientes en la bandeja, junto a las cebollas y las zanahorias. Salamos a gusto por ambos lados y echamos un buen chorro de aceite por toda la pierna, pues luego nos forma una estupenda salsa junto a la grasa que suelta la carne con el asado. Lavamos las patatas con un cepillo y las reservamos para añadirlas enteras y sin pelar a mitad de la cocción, junto a las hierbas aromáticas. Yo he usado un tomillo picante y una variedad de orégano que no se encuentra en las tiendas, más fuerte que la habitual. Pero se puede recurrir al romero también. Lo importante es no quemarlo, es decir añadir esas hierbas al final.   

Ya dentro del asador en la cocina solar:

La botella de agua hace de lastre para que una ráfaga de viento no nos tumbe la cocina. 

Al cabo de una hora y algo, cuando añadimos las patatas, ha quedado ya así:

Y después de casi 3 horas (2 H 45 m):

La carne ha quedado ideal, suelta y jugosa, que dan ganas de comer la pata con las manos. 

¡Que aproveche!